jueves, 28 de mayo de 2009

Perú en la cuenta regresiva

Cordillera Blanca (Perú)

Sombrías predicciones sobre el futuro de la raza humana se escuchan cada vez más en los medios de comunicación. Es que la continua sucesión de desastres naturales y fenómenos climáticos revelan que la brutal contaminación a la que sometemos al planeta tiene repercusiones y el Perú no se salva de ellas. La falta de agua, de alimentos y las muertes por intoxicación del aire serán algunos de los problemas que afrontaremos, en menos tiempo del que nos imaginamos, si no hacemos algo por contrarrestar el daño. Así lo revela la especialista ambiental María Paz Cigarán, que durante su trabajo como directora del Programa del Cambio Climático (PROCLIM), investigó el impacto del calentamiento global en nuestro país y explica que a los peruanos todavía les falta conciencia de lo que puede ocurrir si no cuidan su medio ambiente.

¿Perú contribuye a la destrucción ambiental?

El cambio climático es causado por todos los países en mayor o menor responsabilidad. Perú en 1994, que fue la última vez que se hizo un análisis a nivel mundial, contribuía al 0,4 por ciento de las emisiones, menos del 1 por ciento. Pero esta cifra es igual a lo que emite Suiza y Nueva Zelanda. Es decir que emitimos lo mismo, pero ellos producen cuatro veces más riqueza que nosotros y con las mismas emisiones, quiere decir que el Perú es sumamente sucio para producir la riqueza que produce. En nuestro país la principal causa de la contaminación es la deforestación, somos el segundo país amazónico en el mundo y nuestro nivel de deforestación es sumamente alto. Es por ello que en el futuro Perú también debería entrar a tener compromisos de no calentar más el globo.

¿Cuáles son los efectos del calentamiento global en nuestro país?

Perú es, según el instituto inglés Tyndall Center, uno de los tres países más riesgosos ante eventos climáticos a nivel mundial. Todos los años hay inundaciones sequías, heladas, derrumbes, huaycos, etc. Pero con el calentamiento global éstos se aceleran. El Fenómeno El Niño nos atacaba antes cada 60 años y ahora hemos tenido dos fenómenos El Niño en un lapso de 15 años (1982-83 y 1997-98). Nuestros glaciares están retrocediendo y es un impacto fuerte en el abastecimiento de agua y lo que significa la generación de energía, porque más del 60 por ciento de nuestra potencia instalada de energía es de origen hidráulico. En los próximos 20 años, vamos a tener problemas de desastres naturales por mucho agua (por el derretimiento de los hielos), y después menos disponibilidad de agua para abastecimiento de consumo humano.

¿Cuánto tiempo de vida les quedan a los glaciares de nuestra cordillera?

Según los estudios, entre 15 y 20 años todos aquellos que estén por debajo de los cinco mil metros van a desaparecer. Hay glaciares que tienen mayor índice de derretimiento que otros. En la cuenca del Santa, el máximo de derretimiento se dará dentro de 15 y 20 años. Por ejemplo, Marco Zapata, del INRENA (Instituto Nacional de Recursos naturales), dice que el nevado Pastoruri ya habría retrocedido más del 30 por ciento en los últimos 15 años.


¿Cuáles son las zonas peruanas que más van a sufrir a futuro?

Tienes varias zonas vulnerables. La costa en términos de disponibilidad de agua es la que más va a sufrir, porque es donde más presión existe por el uso del recurso y porque además es un desierto. Asimismo, hay zonas más vulnerables como Piura por el Fenómeno El Niño. Toda la cuenca del Mantaro -que va desde la sierra- se verá afectada por la disponibilidad de agua. En la selva está la zona de Altomayo, que es vulnerable porque fue altamente deforestada.

¿Ante este panorama que trabajos realizó el PROCLIM para contrarrestarlo?

Lo primero que se ha hecho desde el 2003, aunque el tema de cambio climático se viene manejando desde la CONAM (Comisión Nacional del Medio Ambiente) y el Proyecto del Cambio Climático (PROCLIM) desde 1997, es generar información para responder la pregunta de por qué el tema es importante para el Perú y las acciones que deberíamos desarrollar. Para ello, se han generado estudios de vulnerabilidad ante el cambio climático en tres cuencas: El Santa, Piura y el Mantaro. Se han desarrollado propuestas de lo que debería ser la adaptación al cambio climático, generando información a instituciones del Gobierno.

Asimismo, se ha desarrollado la estrategia nacional de cambio climático que establece las líneas principales de lo que se debería hacer en los próximos años. Deberíamos tener un buen sistema de observación del clima a nivel nacional con datos claros y de acceso a la gente, para tomar decisiones de siembras o para prevenir los desastres. Si va a haber una inundación, tú puedes preparar esto con mayor tiempo y prepararte para la emergencia. El Sistema de Absorción del Clima es un proyecto de inversión pública que debería ser priorizado por el Gobierno como tema de información.

Si estos problemas vienen de mucho más atrás ¿por qué los trabajos de planificación son tan recientes?

Creo que no hay un pensamiento integral de lo que es el tema de desarrollo o la incorporación del concepto de riesgo en lo que es la planificación. Por ejemplo, la central hidroeléctrica de Machu Picchu costó más de 150 millones de dólares y se construyó en una zona donde cada 10 años pasaba un huayco. Se construyó ahí porque no se hizo una análisis de riesgos ante eventos climáticos extremos. Así como haces estudios de impacto ambiental, tienes que hacer una evaluación cada vez que haces un proyecto nuevo como la construcción de una carretera. Cada uno de los gobiernos regionales debe comenzar a hacer planes de ordenamiento territorial, que incluyan el nivel de vulnerabilidad que puedan tener sus zonas. Por ejemplo, en Piura siempre se habitan zonas o se siembra en lugares que son inundables o en las que va a haber sequía.

¿Cómo observa la recepción de las autoridades respecto a la información para prevenir desastres?

Yo no creo que haya una conciencia integral del tema porque se reacciona cuando el hecho está próximo. Por ejemplo, cuando va a venir un Fenómeno El Niño los alcaldes limpian cauces en lugar de reordenar toda la ciudad. No hay un concepto real de planificación. Toda la legislación ambiental en general está ahí, pero no hay sanción. La informalidad no te permite implementar muchas políticas porque cuando tú quieres imponer una norma, sólo se aplicara en un 30 por ciento porque el 60 por ciento es informal.

¿Los peruanos tenemos conciencia del cuidado en el medio ambiente?

Hay bastante más conciencia de la que había unos cinco o seis años atrás. Sin embargo, hace falta mucho más conocimiento del tema. En los últimos tres a cuatro meses, el tema de cambio climático ha sonado mucho en los medios y eso ayuda a que la gente tome conciencia. Pero una cosa es tomar conciencia de cuál es el problema y otra es tomar conciencia de que tengo que hacer algo. Son dos etapas distintas, se debe pasar del conocimiento a la acción.

¿Qué puede pasar si no tomamos conciencia del daño que hacemos y sea tarde?

Poniéndonos en un escenario catastrófico, que yo no creo que pase porque los peruanos somos mucho más inteligentes que eso, pueden haber conflictos por las fuentes agua como el que ya ha habido entre Ica y Huancavelica, cortes de energía por falta de agua, así como problemas de seguridad alimentaria porque no se tiene suficiente agua para mantener los cultivos. En el tema de las emisiones de dióxido de carbono en las ciudades, si sigue creciendo, todos vamos a tener problemas respiratorios mucho más agudos y más muertes por contaminación.
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martes, 26 de mayo de 2009

Tú discriminas, yo discrimino…


Una ola de críticas causaron los desafortunados comentarios de dos conductores de un programa de televisión por cable (Jimena Lindo y Renzo Schuller) sobre la asistencia de la novel actriz ayacuchana Magaly Solier y su colega Norma Martínez al Festival de Cine de Cannes (Francia). “Han ido a vender chompas”, dijo Schuller, con una sonrisa de oreja a oreja. “No, han ido a vender chullos”, le replicó Lindo de lo más relajada.
Estas frases no le cayeron bien a muchos, quienes inmediatamente victimizaron a Solier (ignorando que Martínez también había sido aludida) y calificaron de racistas a los referidos conductores. Reacciones, correctas para algunos y exageradas para otros, que colocan una vez más en el tapete cuán tolerantes somos ante las diferencias (raciales, sociales, de género, culturales, etc.). Es fácil indignarse con esos jóvenes conductores que mostraron al aire, a miles de personas, su manera de ver la realidad, pero ¿qué ocurre con aquellos que discriminan a diario, en su trabajo, en la calle y hasta en su casa? ¿Estamos nosotros mismos fuera de este grupo de personas? Rara vez decimos estar de acuerdo con el racismo y la exclusión; sin embargo, en algún momento todos hemos discriminado y nos han discriminado también. Creo que es hora de mirar más a profundidad un problema que nos afecta todos, en lugar de apuntar con el dedo acusador.
Aprovecho este tema para mostrar un informe que hice en setiembre del 2008 sobre la discriminación racial en el distrito limeño de Miraflores. Una práctica tan fuerte que el Municipio tuvo que emitir una ordenanza que sancionaba a los locales comerciales (bares, discotecas, restaurantes, etc.) que no permitían el ingreso a sus instalaciones a personas que no cumplían los “estándares” de su clientela, en pocas palabras que no tenían rasgos caucásicos (piel blanca).

Ordenanza busca acabar con prácticas racistas en locales de diversión



Las prácticas discriminatorias en algunos locales de diversión miraflorinos están con los días contados luego que la Municipalidad del distrito emitiera la ordenanza N° 294.
Miraflores es un distrito de intensa actividad comercial, cuyo flujo de visitantes nacionales y extranjeros lo hacen atractivo para las inversiones en diversos servicios. Los negocios de diversión han proliferado en sus calles y avenidas, lamentablemente, las prácticas discriminatorias también.


Quién no recuerda el caso de los cuatro jóvenes de San Juan de Lurigancho que fueron confundidos con ladrones, mientras paseaban por el centro comercial Larcomar y solo porque no se parecían al vecino “promedio” de esa zona “pituca”. O el de la discoteca del Café del Mar, que luego de sanciones reiteradas por prácticas de discriminación racial, fue cerrada de forma definitiva. Esos son solo dos ejemplos, pero hay muchos más que no salen a la luz, ya sea por la vergüenza que sienten los afectados a ser expuestos o porque el trámite para denunciar es costoso y tedioso.

Es por ello que la Municipalidad de Miraflores, siguiendo el ejemplo, en Lima, de Magdalena del Mar y San Miguel, emitió el último viernes la ordenanza N° 294 que sanciona las prácticas de discriminación en los locales comerciales y de diversión.
El abogado Wilfredo Ardito Vega, de la Asociación Pro Derechos Humanos (APRODEH), explica que antes de la aplicación de estas ordenanzas, las personas discriminadas solo podían hacer la denuncia a través del INDECOPI, previo pago de una cantidad determinada de dinero. Ahora, en el municipio, el trámite es gratuito.
Para este fin, la comuna instaló la Defensoría del Vecino, un ente encargado de recibir las denuncias y canalizarlas para que se realicen las inspecciones a los locales comprometidos en actos de discriminación.
Si bien las quejas y denuncias por racismo en dicho distrito no son recientes, la abogada Milly Paredes, asesora legal de la Municipalidad de Miraflores, confiesa que antes de la ordenanza, dicha comuna no tenía un registro adecuado de las denuncias que periódicamente les llegaban. Sin embargo, aseguró que ello va a cambiar a partir de esta medida.
Asimismo, destaca que esta ordenanza obliga a que los locales comerciales coloquen carteles donde se destaquen frases como: “En este local está prohibida la discriminación”, los cuales reemplazarán aquellos que decían: “Buena presencia” o “Se reserva el derecho de admisión”.
El conjunto de medidas, incluyen charlas sobre discriminación, que en una primera fase estarán dirigidas a los empleados municipales que tienen contacto directo con el público y a los miembros de serenazgo. En una segunda etapa se incluirá a los dueños de los locales comerciales.



Discriminación, también en las provincias
“En otros países, el problema de la discriminación se llama xenofobia, que es el rechazo a los extranjeros, en el Perú más que xenofobia nuestro problema es el rechazo a los autóctonos, a los propios peruanos”, sostiene Wilfredo Ardito, al revelar que las prácticas de discriminación son más fuertes en las provincias.
La discriminación racial en el interior del país se evidencia en el trato que se les da a los turistas extranjeros, muy por encima del que se les da a los nacionales. Ello originó que algunos distritos de Arequipa, Ayacucho, Apurímac, Junín, Lambayeque y Piura emitieran, mucho antes que Miraflores, ordenanzas que regulen estas prácticas negativas.
Pese al avance logrado en la lucha contra la discriminación en algunas zonas del país, en otras, como en el Cusco, la discriminación es escandalosa. Casos como el maltrato a los turistas que no son blancos o que no hablan inglés, son el pan de cada día en esa región.
“Es urgente que la Municipalidad del Cusco emita una ordenanza de esta naturaleza y la haga cumplir, porque ahí la discriminación es mucho más visible. Hay algunos locales donde ningún cusqueño puede entrar, lugares donde ningún peruano puede entrar, inclusive el menú esta inglés y todas las indicaciones están en inglés. Esa es una forma de decir: ‘Si tú no eres anglosajón, ni entres’”, manifestó el abogado de APRODEH.



El Estado tiene trabajo que hacer
Como hemos visto, la mayoría de las iniciativas contra la discriminación se dan a través de los gobiernos locales, sin embargo, hay un trabajo pendiente por parte de las máximas instancias del Estado.
Si bien existen normas que sancionan la discriminación en la Constitución y el Código Penal, poco se ha hecho a nivel de políticas públicas. Incluso, a decir de Ardito, el actual Gobierno ha tenido un discurso despectivo frente a las comunidades campesinas y nativas. Un ejemplo de ellos es la dación de decretos sobre la propiedad de las tierras comunales, sin tomarse la molestia de consultar a los propios comuneros.
El especialista de APRODEH indica que hay muchas formas en las que el Estado puede hacer frente a la discriminación tan arraigada en nuestra cultura.
Una es en la Educación. “El Estado puede intervenir a través de incorporar en el material escolar lo referente a la discriminación”, dice al tiempo de recordar que en muchos textos escolares se muestran dibujos de adultos y niños blancos, que no reflejan la realidad del país.
Asimismo, comentó que se debería regular la publicidad en el canal del Estado y no aceptar a anunciantes que muestran en sus comerciales gente de rasgos caucásicos.



La difusión es importante
La ordenanza municipal de Miraflores es positiva por donde se la mire y es uno de los primeros pasos para luchar contra una práctica de larga data en nuestro país. Sin embrago, como lo señala Wilfredo Ardito, de nada sirve esta medida si los ciudadanos no la conocen y no la utilizan. “Es como una medicina, que si la tengo en el botiquín y no la uso, no hará efecto”, precisa.
La consiga es no tener una actitud pasiva cuando vulneren nuestros derechos, debemos hacer a un lado los prejuicios y la vergüenza para señalar a quienes están equivocados. Solo así podremos avanzar hacia una sociedad más moderna y lograr un cambio real.



¿Cómo denunciar una discriminación en Miraflores?
El afectado puede acudir a la Municipalidad de Miraflores y denunciar en la Defensoría del Vecino, también puede llamar al: 6177272 o escribir al correo electrónico: defensoria@miraflores.gob.pe

domingo, 24 de mayo de 2009

Restaurante Don Bosco

Hace poco descubrí que en el corazón comercial de Jesús María (calle República Dominicana) también se podía comer "como Dios manda". Hago alusión al Ser supremo, pues el restaurante en mención lleva el nombre de uno de sus más destacados seguidores, el sacerdote italiano DON BOSCO.

Pero no crean que por llevar un nombre tan santo, el menú es sinónimo de humildad y simpleza. Quienes hayan ido a dicho lugar pueden dar fe de la gran variedad de comidas que hay (criollas, marinas, pastas, etc.) que se sirven en inmensos platos que navegan como canoas en el mar de la mano de los mozos, en un incesante ir y venir. Es que la contundente presentación de estos manjares (que se recomienda comer de a dos si no se quiere terminar con una indigestión de Padre y Señor mío), hace que desde la una de la tarde se formen colas de comensales a la espera de una mesa. Ancianos, hombres, mujeres y niños esperan anhelantes un lugar para degustar los platillos, que además de una buena presentación, son preparados con devoción. Lomo saltado, causa rellena de pollo, pasta al pesto y humitas, son solo una muestra de lo que se puede comer en Don Bosco. Al final se recomienda un postrecito, pero si su estómago no da para más, una refrescante chicha morada es indispensable.
Los precios van desde los 11 a los 30 soles y se recomienda ir temprano para evitar la espera. ¡Regocijaos hermanos que la mesa está servida!